EL DUENDE DE ZARAGOZA
Iniciaremos
esta leyenda con una pregunta ¿Qué son los duendes?, probablemente tienes
alguna idea de cómo son, ya que en alguna ocasión nos han platicado de ellos.
Pues te diré, los duendes son seres fantásticos y principalmente se les conoce
por ser traviesos.
Aunque
en la actualidad se puede decir que son seres imaginarios y que no todos pueden
llegar a verlos o tener algún contacto con ellos, en la siguiente historia
conocerás uno de los sucesos más controversiales en el país de España.
Esta leyenda tuvo lugar en el mes de septiembre de 1934, Zaragoza. En una madrugada los vecinos de la calle Gascón de Gotor en el número 2 fueron despertados por una inquietante risa, sin pensarlo se levantaron de la cama para ver qué era lo que origina esa risa macabra, pero no lograron encontrar nada.
La
mujer aterrorizada gritó y salió a avisarle a su señora lo que había pasado,
las dos salieron de la casa pidiendo ayuda, los vecinos acudieron a su llamado
y se dirigieron a la casa para asegurarse de que no era una broma de mal gusto
por parte de las dos mujeres. Al ingresar a la cocina pudieron escuchar la voz
siniestra y terrorífica de aquel ser, al buscar el origen de la voz se dieron
cuenta que esta venia del quemador por lo que decidieron dar aviso a las
autoridades de aquel extraño suceso para poner en sus manos la solución más
cercana al caso.
La
noticia no tardó en desplazarse por lo que ya todos conocían lo que sucedía en
aquella casa, cientos de personas se acercaban al lugar para tratar de escuchar
a esa entidad demoníaca, el pequeño ser solía mantener conversaciones con
aquellos que estuvieran interesados en él.
Muchos conocedores del tema paranormal ingresaron para realizar una investigación, como médiums, padres, médicos, jueces, fontaneros y electricistas, pero no se logró saber absolutamente nada. Hasta que llego el dia que calló para siempre se desconoce su origen y hoy en dia no se ha logrado descubrir que paso con el duende de Zaragoza.
Me despido deseándote una linda,
hermosa y acogedora noche.
¡Dulces Sueños!
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